Por: Gonzalo Grondona Bellani
Foto: Altas Pulsaciones
El epicentro explosivo entre una franquicia que quiere volver a ser y otra que quiere seguir arrasando.
Los Ángeles Lakers y Golden State Warriors parten con ventaja de ser los candidatos a llevarse la División del Pacífico. Mientras una franquicia es historia pura, repleta de grandes nombres, títulos y busca volver a ser lo que fue; la otra es un proceso de superación y constancia, que se lleva por delante lo impuesto.
Los Lakers rompieron el mercado de fichajes incorporando a LeBron James. A partir de allí, no se detuvieron y ficharon a Rajon Rondo, Lance Stephenson, JaVale McGee y Michael Beasly. Además se hicieron con Moritz Wagner en el draft número 25. ¿Qué puede aportar cada uno?
Foto: Uproxx
Por arrancar desde lo más alevoso. The King LeBron es la incorporación que más se espera que funcione. Ambas partes, James y Los Lakers, se complementarán para «hacerse respetar». Como le tuvieron miedo en su momento a Magic Johnson, Koby Bryant, etc, ahora es el turno del ex Cleveland utilizar todo su arsenal para aportar no la pizca, sino los ingredientes de calidad, destreza y liderazgo. Aun así, no querrá otra vez tener que hacer todo el trabajo, algo que estando en la franquicia angelina no tendría que pasar. No hace falta hablar de números en este caso, es solamente apreciar lo que esta bestia puede hacer.
Foto: LeBron Wire – USA Today
Enseguida salta la ficha de Michael Beasley. Ya jugó junto a LeBron en Miami Heat hace algunos años. Un punto a favor sin dudas, pero que ahora deberá de superar la exigencia de partido a partido de estar en los Lakers. Cada juego se torna un deber y una dura prueba; una vara tan alta por la historia, pero a la vez otra más baja por la dificultad que han tenido los Lakers para volver a convertirse en una dura parada para los rivales. Beasley tuvo una buena temporada en los Knicks promediando 13,2 puntos y 5,6 rebotes. Así también Stephenson, un jugador con lanzamiento de 3 puntos, volcadas, bandejas y potencia para jugadas de contragolpes. Se añade también a la lógica el por qué fueron a buscar a Rondon.
Yendo a la base de la última temporada, los fichajes se pretende que logren unirse fuerzas con Kyle Kuzma, quien sobresalió en su equipo por su joven y aspirante potencial; en 2400 minutos sumó 1242 puntos, 159 triples convertidos, 147 tiros libres convertidos de 208 oportunidades, lo que constituye a un 70% de efectividad.
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Por otro lado, Golden State busca defender su corona apuntando a reforzar la base ya instalada con un quinteto poderoso. Los Warriors apuntaron en su planilla a DeMarcus Cousins, quien tuvo un paso más que destacado por New Orleans Pelicans. Más allá de un contrato mínimo de 5.3 millones, la exigencia de jugar en Golden State no pasa por ese lado. Los Warriors tomaron la características de ser ambiciosos. Podrán ganar el campeonato de esta temporada, la siguiente y la subsiguiente, pero aun así no quedarán satisfechos. Es un pozo sin fondo sediento de ganas de gloria y, además, de llenarse con las ganas de aquellos fichajes que quieren alzar al final de las finales el título de campeones.
Alley-oop! 