Boston Celtics-Phoenix Suns, el mejor partido de la historia de la NBA

Por Pedro Landoni

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Foto sacada de: https://www.basketball-reference.com/boxscores/197606040BOS.html

En las finales de la temporada 1975-1976 que se disputaron los Boston Celtics frente a los  Phoenix Suns se dio el que, es considerado para muchos el mejor partido de la historia de la NBA y AlleyOop te lo va a contar.

Cómo llegaban los equipos: Phoenix Suns llegaban a las finales de “relleno”, luego de terminar en la tercer posición de la conferencia oeste y no contar con un plantel de renombre a pesar de contar con Alvan Adams (Rookie del año), Ricky Sobers, elegidos en el draft de esa temporada, Curtis Perry, Garfield Heard, Paul Westpal, base que llegaba proveniente justamente de los Boston Celtics y en el banco a Pat Riley y Dick Van Arsdale. Llegaban a las Finales NBA tras derrotar a los Sonics por 4-2 y a los Warriors, que habían terminado primeros en la conferencia Este.

Mientras que del lado del conjunto verde estos terminaban la conferencia Este en el primer puesto por quinta temporada consecutiva y con un récord de 54 partidos ganados y 28 perdidos.

Su equipo titular estaba lleno de figuras con los especialistas en la zona interior como lo fueron el ala-pivot reboteador Paul SIlas y el pívot Dave Cowens. En el plantel también estaban figuras como el futuro “Hall of Fame” Jo Jo White, Charlie Scott, gran anotador de la ya olvidada ABA y proveniente de los Suns y John Havlicek, que a pesar de contar con 35 años era elegido All-Star en esa temporada.

Los Celtics llegaban a las finales tras vencer a los Buffalo Braves (hoy en día transformados en Los Angeles Clippers) en 6 partidos y en las finales a los Cleveland Cavaliers también por 4-2

Los primeros partidos

El 23 de mayo era el comienzo de una nueva edición de las Finales NBA, con unos Celtics claramente favoritos.

La serie arrancaba a favor de Boston con los dos primeros partidos ganados en su casa, el TD Garden. Ambos partido mostraban la superioridad del conjunto del este venciendo a los Suns por 98-87 y 105-90.

Luego, la serie se mudaba a Phoenix para jugarse los partidos 3 y 4 de la serie. En el estado de Arizona se jugaban estos encuentros y a pesar de ser dos partidos peleados, el equipo local se llevaba la victoria en ambos encuentros por 105-98 y 109-107 y el quinto partido iba a Boston en lo que iba a ser por muchos como “El Mejor Partido de la historia de la NBA”

El partido Inolvidable

Debido a los malos comienzos en los primeros cuatro partidos, el entrenador de Boston decide poner en el parqué a John Havlicek, que a pesar de tener 35 años, fue All-Star esa temporada.

Los Celtics al pasar nueve minutos ya ganaban por veinte puntos (32-12), un jugador de Phoenix Suns se torcía el tobillo –Erickson– y al descanso el marcador era para el conjunto local por 61-45.

Parecía que era todo color de rosas para el conjunto del este pero no, el conjunto violeta reaccionaba de la mano de su defensa y comenzaban a emparejar el marcador. Así, se iban al último cuarto los Celtics por una diferencia de cinco puntos (77-72).

El ùltimo cuarto seguía igual de parejo que el tercero, hasta que a falta de 22 segundos para el cierre, los Phoenix Suns se ponían por primera vez arriba en el marcador luego de un tiro libre anotado por Curtis Perry.

Posterior a eso, Havlicek tomaba la responsabilidad y le sacaba la falta a Adams (Que se iba a ir expulsado por seis faltas cometidas) y John anotaba el primer libre y el segundo lo erraba dejando el marcador empatado en 95. Los Suns tenían una última oportunidad de ganar el encuentro, faltando tres segundos contaban con la pelota a su disposición. Pero estos perdían el balón y el partido se iba a tiempo suplementario.

Primer Tiempo Suplementario: Ya desde el comienzo fue muy disputado con otra torcedura de tobillo de un jugador de los Suns, en este caso de Westpal. Este equipo resistiría a pesar de los ataques constantes de los Celtics y el suplementario terminaría 101-101.

Segunda prorroga: era parecida a la primera con problemas para conseguir puntos de ambos equipos y buenas defensas.

A falta de quince segundos para el final, Boston ganaba por tres puntos, con posesión para los Suns. Dick Van  Arsdale anotaba un tiro de media distancia y ponía el partido a uno (En ese momento no existían los triples), luego del saque del conjunto verde, Paul Westpal robó el balón y este se lo pasó a Perry que luego de un intento fallido, este agarró el rebote y lo convirtió poniendo a los Phoenix Suns arriba en el marcador por 110-109.

Con solamente cuatro segundos para jugar, la pelota era a favor de los Celtics y el muchacho de 35 años, John Havlicek se fue hacía la canasta anotando un doble, dejando el marcador 110-111 para el conjunto verde. El público estalló en el Garden, pero no se dieron cuenta que uno de los árbitros indicaba que el partido no había terminado. Durante el lío, un hincha de Phoenix agredió al árbitro y posteriormente fue detenido. El partido se reanudó con un tiro libre a favor de Boston, luego de un tiempo muerto pedido cuando ya no tenían en una decisión inteligente del entrenador de Phoenix John MacLod para que puedan sacar desde la mitad de la cancha. El  lanzamiento ingresó por parte de White y los Suns sacaban de mitad de cancha. Y ocurrió lo inesperado. Perry asistió a Garfield Heard, quién se quitó la marca de encima y anotó un doble sobre el final del partido para forzar un tercer tiempo suplementario.

El vídeo de los últimos segundos del segundo tiempo suplementario

Tercer suplementario. Ya con los jugadores extenuados de ambas partes y muchos con seis faltas,  el entrenador Celtic Tom Heinshon movía el equipo y recurría a Glenn McDonald, un alero que jugaba poco y luego fue despedido de las Finales y tan solo jugó nueve partidos mas en la NBA. Ese día tuvo su noche de gloria tras anotar 6 puntos en el tercer suplementario dándole la victoria a Boston con sus anotaciones. Así, el partido quedaba en manos del conjunto local por 128-126 y Glenn se transformó el héroe de la jornada.

El partido cinco completo

 

El sexto partido iba a ser en el estadio de los Suns, en Arizona. El partido iba a tener un único dominador, que fue Boston y que se iba a quedar con el campeonato tras vencer al elenco local por 87-80. Jo Jo White fue el MVP de las finales y esta serie es recordada como una de las mejores finales de la historia de la National Basketball Association.

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